Aprovecha mejor el espacio haciendo que tus muebles sigan el ritmo de tu día. Trata de que la armonía de tus muebles vaya de acuerdo con tu circulación por la casa. De esa forma, la circulación cotidiana dictará la decoración.
Elige soluciones bien pensadas que creen la sensación de espacios abiertos e impriman mucho carácter, sin tener que sacrificar la estética. La cocina se ha convertido en una parte primordial de la casa, se ha abierto y esto permite ampliar el espacio de la sala-comedor hasta ella.
El acomodo en L es muy importante en espacios pequeños, pues permite aglomerar los muebles y dejar libre la circulación. Puedes aprovechar las cuchillas para poner ahí los muebles y después colocar un sillón suelto, un puf que tenga vista hacia la sala y el comedor sin estorbar. Si hay un poco de amplitud, se puede poner un biombo o un love seat con una consola detrás para dividir los espacios.
En la cocina se utilizan muchos accesorios y existen dos opciones: Si tus utensilios son de diseño tal vez convenga tenerlos expuestos, obviamente bien organizados; pero si son puramente funcionales lo mejor es mantenerlos almacenados cuando no los estás utilizando.
El color juega un papel primordial, pues tiene la capacidad de reducir o ampliar espacios.
El baño tiende a ser uno de los espacios más pequeños en el hogar, así que no descuides el efecto de los colores que apliques en él. Procura que sean claros para agrandarlo visualmente.
Si el espacio es pequeño y además bajo, no es recomendable poner cenefas, pues cortan el espacio y, si éste además de ser pequeño es bajo, parecerá un sitio comprimido.
Si buscas agrandar tus espacios, puedes pintar del mismo color un muro y el techo, así lograrás un efecto de “cielo”.
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